En 2015 Cuba declaró Monumento Nacional al Parque Arqueológico Subacuático Batalla Naval de Santiago de Cuba 1898, donde yacen los pecios de la escuadra del almirante Cervera. La novedad estuvo en que junto a la ceremonia oficial, que se organizó en la propia fortaleza del Castillo del Morro, hubo otra paralela y que fue a 12 metros de profundidad, junto al pecio del crucero Almirante Oquendo, muy cerca de la playa.
Allí estuvimos muy pocos, pero con una emoción muy intensa. Se instalaron dos tarjas o placas como homenaje a los marinos muertos en aquella contienda. Para mí fue especialmente emocionante encontrarme allí abajo, en silencio, sintiendo y compartiendo aquellos extraordinarios momentos con mi amigo Teo Rubio, buceador. Recé durante unos instantes por el sufrimiento y padecimiento de aquellos marinos españoles que lucharon con honor, sin cobardía, pero sabiendo que iban hacia una muerte casi segura.